Reseña: Adiós, mi loca europea

31 mar 2017

Adiós, mi loca europea
Mi puntuación: ★ ★ ★
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Perry Stormaire se encuentra en esa difícil etapa entre terminar la preparatoria y escoger la universidad en la que seguirá la carrera de su vida. Mientras tanto, aprovecha sus días trabajando como ayudante en el despacho de su padre (¡una carta de recomendación del bufete no le vendría nada mal en Columbia!), asistir a talleres de debate (aunque el sigue prefiriendo la natación) y tocar junto a su banda de rock, Inchworm, e incluso ayudar a la estudiante de intercambio que ha llegado a su casa. ¿Rubia, alta y escultural? Quizás sea lo que muchos imaginaban que sería Gobija, pero no resultó exactamente así. Más bien es excéntrica, distraída y con un gusto peculiar en cuanto a sentido de la moda. Lo más extraño, sin embargo, es que apenas faltan dos semanas para que regrese a su natal Lituania y Gobi tiene una petición muy particular: quiere que sea él, Perry, quién le lleve al baile de fin de curso. 

En fin, no es que sea muy amigos y además él tiene un compromiso con la banda, pero a base de cierta manipulación emocional por parte de sus queridos padres, termina llevando a Gobi al baile... y todo se convierte en una locura. Resulta que Gobi no es tan distraída como pensaba, ni siquiera es una estudiante de preparatoria. Más bien es una especie de asesina a sueldo, experta en todo tipo de armas, reina del espionaje y con cinco objetivos muy claros, repartidos por la ciudad de Manhattan y que no sobrevivirán a lo que queda de la noche. Como en las películas, vaya. Solo que esto no es un filme y Perry es obligado a ser coartada y conductor de esta loca europea, además de cómplice de asesinato (como si amenazar a su familia no fuera suficiente).

Me llamo Gobija, como la diosa del fuego de la mitología lituana. Se dice que cuando Gobija se enoja da un paseo y quema todo a su paso.

El título llama, ¿a que sí? Por lo menos estoy segura que habrá despertado cierta curiosidad (al menos así fue como llegué a ella). Buscaba algo ligero, pero interesante, una novela que me atrapara antes de continuar con mis próximas lecturas. Había anticipado que Adiós, mi loca europea sería una novela peculiar, pero no imaginé que fuera tanto. Lo cierto es que la historia llega apenas a las doscientas páginas, pero eso no es impedimento para condensar adrenalina, problemas familiares, crímenes e incluso involucrar a la mafia. Gobija no tarda en revelar su verdadera personalidad y todo se convierte en un vertiginoso cuenta atrás en la que cualquiera pensaría que ninguno terminará con vida... ni siquiera los propios protagonistas. Algo así como Agente 007 meets Fast & Furious, pero en versión adolescente (pero sin caer en clichés). 

No debes temer a un poco de sangre. La vida está llena de ella.

Sin duda los dos grandes protagonistas son Perry y Gobija (por algo la bilogía lleva ambos nombres). De la noche a la mañana él pasa de ser un adolescente más con problemas existenciales a ser casi un objetivo de la policía por andar dejando cadáveres y destrozos allá por donde vaya. No le basta con arrastrar sus propias discusiones con sus padres o sus amigos, sino que ahora tiene que intentar convencer a Gobi - aunque tampoco esté seguro de si se llama así - de que deje la locura que pretende cometer. Como personaje me ha parecido bastante entrañable (y el más trabajado) y su propio carácter le aporta las pinceladas de cinismo al argumento. Las pocas páginas de la novela no permiten profundizar demasiado en la psicología de ninguno, pero debo reconocer que sabemos de Perry lo suficiente para llegar a tomarle cariño. Gobija, por su parte, también aporta lo suyo y ambos se alejan de los estereotipos que normalmente se ven en literatura juvenil (además de que juntos tienen bastante química, aunque no lo parezca).

- Solo promete que no lastimarás a mi familia
- Las familias salen lastimadas, Perry, no hay garantías de este lado de la tumba.
- Eres una verdadera psicópata, ¿lo sabías?
- Nunca lo negué

Quizás mi único problema con la novela es al llegar a la página final, cerrar el libro y pensar con calma sobre los hechos. Vale, entiendo los motivos que tiene Gobija para cobrar venganza (que sólo se revelan hacia el final de la historia), pero no termino de creer que sea necesario llevarlo a tal escala. Mucho menos que en poco tiempo llegue a convertirse en una especie de ninja, experta en explosivos, venenos, camuflaje y espionaje. Digo, apenas tiene veintipocos años, a muchos le tomaría más tiempo. Si no fuera porque eso ha terminado chirriando durante los capítulos, quizás le hubiese puesto algún punto adicional, porque Adiós, mi loca europea es bastante entretenida, se lee de una sentada y divierte. 

En conclusión (¿ya les dije que es una bilogía?) aunque la novela tenga un final más o menos cerrado hay una segunda parte lista y publicada en español. No sé si llegue a leerla, porque los hechos me parecieron geniales donde quedaron, pero nunca se puede anticipar si algún día necesitaré otra dosis e acción y suspenso, con un ritmo tremendamente ágil como este. No les pienso adelantar más sobre la trama, creo que es una novela que se disfruta sin conocer muchos más detalles.



Carta a Mario Vargas Llosa

28 mar 2017


Querido Don Mario,

        Han pasado varios años desde que lo conocí a través de las letras y hoy tengo el gusto de poder decir que he leído y disfrutado varias de sus novelas. Algunas de ellas llegaron a mis manos durante mi época de colegial, cuando aún era uno de los candidatos más voceados para el prestigioso Premio Nobel de Literatura (que finalmente obtuvo en el 2010). Fue gracias a esas clases de literatura que tuve un primer acercamiento al boom latinoamericano, del cual usted es considerado uno de los máximos representantes. Recuerdo que la profesora nos hablaba de “jóvenes escritores que fueron a conquistar Europa con sus novelas sobre América Latina” y mi imaginación recreaba a un joven Mario caminando por las calles de Barcelona o tomando un café en largas y tendidas tertulias con sus compañeros de esos años, tales como Cortázar y García Márquez. Me imaginaba enriquecedoras charlas donde la coyuntura política y social del momento eran los temas principales de fructíferas conversaciones. 

        Recuerdo aquel momento cuando en el colegio nos dejaron de tarea leer los primeros capítulos de La Ciudad y los Perros y créame que al final me terminé leyendo la novela entera. No sólo porque la historia me atrapó desde el comienzo, sino que me mostró una realidad que en esos momentos no era ajena. La historia de todos estos alumnos viviendo en el Colegio Militar Leoncio Prado, las aventuras y las dificultades que padecían, el maltrato y el dolor de ver a adolescentes que alejados de sus familias tenían que recibir una rígida y castrense formación militar… creo yo que a partir de esta novela es que tengo mis conflictos con la instrucción militar y todo lo que a ella se refiere.

       Años después, Don Mario, me encontré con otra de sus historias que definitivamente entra en el top de mis mejores lecturas de la vida: Conversación en la catedral. Con esta novela tengo una historia particular. Por motivos personales tuve que hacer un viaje hacia Piura y lo hice por bus; dieciséis horas de camino y ... ¿qué mejores compañeros de viaje que Zavala y Ambrosio? Si hay una novela que no pude despegar de las manos ha sido esta, muy especialmente por la prosa, el argumento que se van confabulando entre ellos, las verdades que va conociendo Santiago Zavala sobre su padre y su familia. Otro de los personajes que realmente retrata la novela fue Cayo Bermúdez; sórdido y sin escrúpulos. ¿Sabe que, Don Mario? Aun cuando la haya escrito a finales de los años sesenta, los temas que usted aborda - la corrupción, el manejo del poder y los grandes negocios que se arman para beneficios de unos pocos - son también temas que hoy en día son parte de nuestra sociedad, a tal punto que es casi como leer una crónica de la actualidad.

       Varias veces me han preguntado con qué novela debería uno empezar a leer su obra (sobre todo si se trata de jóvenes lectores), y mi respuesta es casi siempre la misma: Travesuras de la niña mala. Y sí, también con ella tengo una anécdota que contar: el libro llegó a mis manos un domingo previo a mis parciales en la universidad. Recuerdo que compré la novela que acababa de salir a la venta (2006), por puro impulso, pese a que sabía que no podría leerla hasta acabar los exámenes. Grave error, porque decir que “sólo voy a leer las primeras páginas para saber de qué va” es una de las grandes mentiras de todo lector. Cómo se imaginará, mis notas de esos parciales fueron de regulares a malas porque mi mente se negaba a entender fórmulas o hechos, sino que acompañaba a Ricardo Somocurcio en sus sus periplos encontrando y “perdiendo” a la “chilenita”. ¿Estudiar? No, mis días se fueron en todas y cada una de las ciudades dónde vivía y, a la par que él, se me rompía el corazón cada vez que su gran amor se alejaba. Puede que Travesuras de la niña mala esté ambientada en ciudades y momentos políticos puntuales, pero lo realmente extraordinario de la historia es el conflicto amor / desamor de estos personajes. Disfruté cada página y cada lugar gracias a usted, y aunque las calificaciones finales no fueron las mejores, la aventura vivida lo valía con creces.

        Los cuadernos de Don Rigoberto o La Tía Julia y el escribidor (que recuerdo la leímos a la par con una amiga que estudio periodismo con la finalidad de poder conocerlo y entrevistarlo) también han sido novelas que me han acompañando y que han dejado un maravilloso recuerdo en mi vida como lectora. Tengo pendiente La Guerra del fin del mundo, novela que muchos críticos la señalan como una de sus grandes obras. Particularmente sigo creyendo que Conversación en la catedral es insuperable pero, nada está dicho mientras usted siga deleitándonos con sus historias. 

        Esta misiva no sólo es un recorrido de mis apreciaciones como lectora de sus novelas, don Mario, sino el agradecimiento como lectora por las grandes historias que nos ha brindado. Sé que muchas veces se confunde su actividad de escritor como la de político, pero para mi lo importante siempre es el valor que nos deja en cada una de sus novelas, ensayos y crónicas periodísticas. Si hay un autor que todo peruano y latinoaméricano debe leer como parte de su educación y formación personal debe ser a usted - además de sus congéneres del boom latioaméricano - por el legado que nos sigue deja para la posterioridad, pero sobre todo, por la pasión que se lee en cada una de sus páginas. Le deseo una larga vida, don Mario, y que celebre en su amada Arequipa sus primeros 81 años.

Con cariño,

Victoria Delgado

Reseña: Dulce perdón

23 mar 2017

Dulce perdón
Mi puntuación: ★ ★ ★
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La gente guarda secretos por dos razones: para protegerse a sí misma o para proteger a los demás

Hannah Farr podría ser el perfecto ejemplo de una mujer con la vida soñada: conduce su propio programa de televisión en Nueva Orleans y tiene el cariño de sus muchos seguidores. Económicamente no le va mal y en cuanto a lo personal, cuenta con un novio respetado como alcalde de la ciudad. Quizás nunca se hubiera cuestionado nada de lo que había logrado en sus treinta y pocos años de vida si cierto sobre no hubiese llegado a sus manos. Contenía una nota y dos piedras, pero fueron suficientes para empezar a desbaratar lo que hasta entonces creía que era una vida perfecta. Fiona Knowles es la autora de esa carta, una mujer con la que compartió salón de clases en la escuela y ahora viaja por el país predicando sobre las Piedras del Perdón. La idea es sencilla: cada carta incluye dos guijarros y se le pide al destinatario dos cosas. Una es que perdone a la persona que se la envía. Y la otra, que a su vez pida perdón a alguien a quién hizo daño a lo largo de toda su vida. El problema es que Hannah no cree en esa cadena del perdón y tampoco está segura de que haya alguien a quién deba decir algo más que un "lo siento". Pero todo cambia cuando los índices de audiencia de su programa empiecen a bajar y necesite una medida desesperada. ¿Quizás invitar a Fiona Knowles sea una buena opción? ¿O quizás ese será un primer paso para quitar cada una de las capaz que envuelve la coraza de Hannah? 

Los humanos tenemos una característica maravillosa, la capacidad de cambiar de opinión y oh cuánto poder nos da esto

Lori Nelson Spielman me ha vuelto a sorprender. Conocí a la autora con Mi lista de deseos, una novela que sigue el mismo estilo de Dulce Perdón y que ofrece mucho más de lo que uno espera. Por la sinopsis y la portada uno puede llegar a creer que se trata de algo de chic-lit (o incluso alguna novela de autosuperación), pero nada más lejos de la realidad. Lo cierto es que uno empieza este libro con una idea, pero al llegar a las últimas páginas se cae en cuenta que el rumbo que ha tomado la historia es otro. La Cadena del Perdón es la excusa que iniciará todo, lo que llevará a Hannah a tomar varias decisiones y quitarse la venda de los ojos. No solo su programa está en juego, sino su propia estabilidad emocional. No es sólo el ráting o que alguien amenace con quitarle el puesto, sino también que empieza a darse cuenta que su relación con su novio no es tan maravillosa como pensaba. Si no presenta una idea innovadora que suba los índices de audiencia le quedan los días contados, pero ser ella la protagonista de una historia de Perdón es algo que nunca imaginó. Sobre todo porque eso implica desenterrar sus propias memorias, buscar a una madre que escogió quedarse con una pareja en lugar de con su hija y afrontar de una vez por todas aquel hecho que marcó su adolescencia y la llevó a ser quién es ahora.

No encontraras tu futuro hasta que te reconcilies con tu pasado

Fiel a su estilo, Lori Nelson Spielman no devela todas sus cartas desde las primeras páginas. Ella es de esas autoras a la que les gusta construir su historia de a poquito, revelando solo cuando es necesario y utilizando flashabacks para darle intensidad al momento. Lo cierto es que su prosa es directa, si muchas florituras, pero con un ritmo que se mantiene estable a través de las páginas. Dulce perdón es como una cebolla, en la que el lector empieza a descubrir lo que verdaderamente se cuece con cada capítulo que pasa. Y Hannah, como protagonista, es bastante aceptable. Tiene sus momentos melodramáticos e incluso hay ocasiones en la que tiende a victimizarse, pero al conocer la situación que la lleva a ser como es todo empieza a encajar. Uno como lector siente el deseo de entrar en la historia, gritarle unas cuantas cosas y quizás hacerle tomar decisiones que podría evitar meteduras de pata pero... ¿qué clase de ser humano no comete errores? ¿Cómo aprender si nunca te has equivocado? Me alegra decir que esos momentos de frustración lectora se vieron recompensados posteriormente, cuando uno ve la evolución del personaje, los cambios que le llevan a ser una mejor Hannah Farr. ¿Qué si la historia tiene algo de romance? Sí algunas pequeñas pinceladas, lo justo para aderezar el argumento sin necesidad de resultar demasiado edulcorado. 

Creo yo que mi único conflicto con esta historia es el final, el último gran giro que toma la novela y que desemboca en pequeñas subtramas que no han terminado del todo. La autora se atreve a tocar un tema delicado y espinoso - ¿pedofilia? ¿abuso sexual? lo dejo a criterio de los lectores - pero lo aborda de manera superficial, sin la fuerza ni la contundencia necesaria que la historia merecía. Algo entre sí y no, que resulta ser un gris poco creíble y que puede resultar chocante para algunos lectores (si resulta cierto) o dramáticamente ridículo (si es que no). Pero la autora se lava las manos y lo deja ahí, dejando también cierto regusto agridulce. 

En conclusión, me remito a mis anteriores palabras y vuelvo a decir que Dulce perdón en el buen sentido y en el no tan bueno. Aborda distintos temas y lo hace con soltura, desde las relaciones familiares, románticas e incluso laborales. Profundiza en el vínculo entre madre e hija y sobretodo, nos da un increíble tour por la pirámide social dentro de los medios de comunicación y los tejemanejes que ahí se cuecen. El giro final quizás sea el punto débil de la historia, pero salvando eso, no hay duda de que se disfruta.



La bella y la bestia (2017)

20 mar 2017


A dos días de haber visto la película y pasado el momento de emoción (al menos un poquito) me he tomado unos momentos para pensar en los diferentes detalles de esta nueva adaptación del clásico de Disney. La bella y la bestia (1991) nunca fue mi película animada favorita, pero sí que me gustaba lo suficiente para seguir la historia, las canciones e incluso tomar un par de fotos cuando pude ir a Disneyland. Sin embargo, algo pasó con este live action que me ha puesto los sentimientos a flor de piel y sí, soy una más de los que han caído bajo el encanto del soundtrack y no he dejado de escucharlo desde que llegué a casa. Pero vayamos por partes - y sin spoilers - que aunque que he disfrutado muchísimo de la adaptación, siempre quedan algunos detallitos que no terminaron de encajar en el puzzle. 

Cuando anunciaron que Emma Watson sería quién cracterizaría a Bella tuve mis dudas. Me gusta mucho como actriz y sentía que podía aportar bastante a la película pero el gran temor era saber si lograría desvincularse de la sombra de Hermione. Sin embargo, creo que ha logrado darle a la historia de Bella algunos matices de los que carecía la versión original, no solo en cuanto a carácter del personaje, sino también al trasfondo. Conoceremos en qué ocupa sus días, y muy especialmente, la razón por la que la rosa es tan importante para ella. No obstante, tengo que reconocer - mas bien confesar - que mi principal motivo para ver esta película no fue otra que Dan Stevens, el actor que da vida a la Bestia. Lo conocí en Downton Abbey y le seguí la pista durante otros trabajos cinematográficos, por lo que era imposible perderme uno de sus papeles protagónicos. Dan da la talla como Bestia, mostrando diversas facetas suyas. No es una criatura rígida y agresiva, sino que tiene también momentos tiernos y un sentido del humor que me ha encantado conocer.  Y sí, más allá de unos ojos increíbles (imposible no darse cuenta), tiene una voz que aporta lo suyo a la historia, muy especialmente el momento en que debe separarse de Bella mientras siente que en su corazón queda un vacío. Creo que uno de los grandes aciertos del director es buscar llenar y corregir esos pequeños errores que quedaron en la película animada. ¿Por qué el príncipe se comporta tal cómo lo hizo? ¿Qué pasó con sus padres y el resto de población aledaña? ¿Por qué Gastón es tan.. tan Gastón? En fin, que todas esas preguntas tienen una justificación que le da profundidad a la historia y trata de atar todos los cabos de la maldición, llevando a que todo sea más creíble. 


La preciosa fotografía se ve acompañada de un sountrack increíble. De pequeña vi la versión animada en español, pero escucharla en inglés es otra historia. Si hay algo que caracteriza a esta adaptación es que destila charme français tanto como le sea posible: en el vestuario, los escenarios y las propias pistas musicales. Luke Evans se luce en Gaston y Ewan MacGregor como Lumière en Be our guest, pero en general creo que todas las canciones han sido caído en el momento preciso (difícil olvidar Evermore). Agradezco infinitamente que hayan decidido incluir frases, gags e incluso ese acento francés en ciertos personajes, le da un plus a la película (y personalmente me sirvió para darme cuenta que mi propio francés no estaba tan oxidado como pensaba). ¿Y las animaciones? Sencillamente espectaculares. Quizás por momentos pecaban de demasiado fantasiosos, pero una vez que uno se acostumbra solo quiere dejarse llevar por la historia.

Entonces, ¿hubieron cambios significativos entre la versión original de 1991 y esta nueva adaptación? Sí, algunos, pero todos para bien. Me alegra que de alguna forma hayan "modernizado" la historia, pulido los detalles y ofreciendo una película que brilla por su estupenda calidad. Yo me pasé las últimas semanas evitando cualquier tipo de materia (stills, trailers, clips, etc) pero creo que aún así hubiera logrado cumplir todas mis expectativas. Quizás lo más flojillo fuera la propia construcción de Bella, pero es que teniendo el listón tan alto con el resto del elenco y la producción, Emma no llegó a brillar tanto como pudo hacerlo. Por supuesto, es una protagonista maravillosa, pero quizás pudo ser un poquitín mejor. ¿Mis personajes favoritos? Ni Bella ni Bestia - aunque ambos lo hacen genial - sino el increíble Lumière (¿existe la posibilidad de hacer un spin-off? ¿por favor?). ¿Escena preferida? No, no es la de la biblioteca ni tampoco la del baile. Creo que me atrevería a decir que es aquella donde se interpreta Gaston ¡es que la coreografía y la música hacen una fusión increíble!


Creo que me estoy conteniendo bastante al momento de escribir esta líneas (y solo para que conste, he puesto el soundtrack de fondo). En resumen, que he disfrutado demasiado con esta nueva adaptación. Cada detalle de la producción esta muy bien cuidado, el cast escogido encaja casi a la perfección con los personajes y los escenarios, el vestuario y el propio trabajo con el guión lleva a que toda la película se disfrute de principio a fin. Sí, puede que La bella y la bestia no haya sido mi película favorita de Disney, pero podría empezar a reconsiderarlo. Mientras tanto... ¿se animarán a darle una oportunidad? En lo que a mí respecta estoy tentada a verla una vez más en el cine.

Bullet Journal, ¿qué es y para qué sirve?

15 mar 2017


Si hay un término que últimamente se ha escuchado bastante en redes sociales, esa es el famoso Bullet Journal. Sea en vídeos, fotos o notas, ha ido cobrando más fuerza con el inicio de año. Pero, ¿qué es eso y para qué sirve? Escuché Bullet Journal por primera vez hace ya varios meses, pero apenas conocía sus verdaderas características. Curiosa como soy, he buscado información por todos los medios posibles (incluyendo Pinterest e Instagram) y ¡oh, sorpresa! Resulta que a mí también terminó encandilándome la idea. Pero vayamos paso a paso, que he intentado resumir y ordenar todos los datos que he encontrado en las siguientes líneas.

¿QUÉ ES UN BULLET JOURNAL
Es nada más y nada menos un sistema de organización muy (muy) personalizable, que estoy segura que gustará aún más a las personas creativas y/o aquellas a las que una agenda normal no les funciona tan bien como quisieran. Muchos (incluyéndome) no solemos utilizar todo el espacio que proporciona una agenda común - sea por vacaciones, falta de tareas o flojera - por lo que se desperdician las hojas y eso es un pequeño golpe a nuestra economía. Sé, además, lo difícil que es conseguir una agenda que se adapte justamente a nuestras necesidades: o las dimensiones no nos gustan, o el espacio no está distribuido cómo queremos o las hojas no son suficientes o simplemente el diseño no nos convence. Yo suelo ser muy puntillosa con esos detalles y encontrar la agenda ideal me toma muchos días (o semanas). 


¿CÓMO FUNCIONA Y QUÉ NECESITO PARA TENER UN BULLET JOURNAL?
Todo parte de la idea de una libreta en blanco, lapiceros y mucha creatividad. Lo que se busca es que cada uno pueda diseñar su propia agenda de acuerdo a sus necesidades, dando espacio necesario a aquello a lo que quieres darle más relevancia. Lo mejor de todo es que uno puede añadir lo que desee, desde listas, ideas, anotaciones varias hasta dibujos, frases o decorar con elementos de papelería. El bullet journal es la vía libre a la creatividad de cada uno y la mejor forma de encontrar el estilo de organización que nos funciona mejor. Ahora, si hablamos de decoración, la buena noticia es que cualquier libreta en blanco funciona a la perfección. Puede ser de hoja entera, rayada o cuadriculada. Tipo block de notas o cuaderno con pasta blanda o dura. Y para los detalles no hay límite: utiliza plumones, colores, fine pen, bolígrafos en gel, washi tape, post- its, stickers ¡o lo que quieras! ¿Y me entienden cuando les digo que es ultra-personalizable?.


¿QUÉ OTRAS IDEAS EXISTEN PARA EL BULLET JOURNAL?
Si bien esta tendencia empezó a expandirse siendo una agenda a gusto de la persona, hay muchas otras ideas que pueden funcionar bien en ese cuaderno en blanco. Puedes llevar un registro de las metas que tienes por cumplir (en el colegio, la universidad o la vida), utilizarlo como planificador (semanal, mensual, anual o cómo prefieras), almacenar listas y más listas (desde fechas de cumpleaños o teléfonos, hasta las películas que quieres ver, lugares por visitar o incluso recetas). ¡Es mucho mejor que un planner y no tiene las limitaciones de una agenda típica! Eso último es lo que me ha inclinado a usar el Bullet Journal: el hecho de tener un lugar donde registras las cosas que me apasionan de la forma que más me convengan.


¿Y SI NO SOY TAN CREATIVO/A?
¡Para eso existe Pinterest, Instagram y We heart it. Si tienes una vena artística, estoy segura de que no tendrás mayor problema en decorar los espacios en blanco y si consideras que no ¡las redes están para ayudarte! Aquí les dejo algunas cuentas de Instagram que son toda una inspiración para organizarse y decorar, les digo que vale la pena darse una vuelta por ellas. 




¡Y creo que eso sería todo por hoy! Cualquier otro detalle que sepa podría ir actualizando este post (¿o quizás les gustaría más entradas como esta, con muchas más ideas e inspiración?). ¿Ustedes tienen un bullet journal o se animaría por uno? ¡Los leo en los comentarios!


Reseña:

13 mar 2017

Entre el demonio y el profundo mar azul
Saga Between (1 de 2)
Mi puntuación: ★ ★ ★ 
+ Datos sobre el libro | Lee los primeros capítulos


Dejas de temerle al diablo cuando sostienes su mano... y nadie lo sabe mejor que Violet White. Ella, que siempre ha sido la chica rara con cierto gusto por lo vintage y una extraña fascinación por los cuentos góticos se encuentra atrapada en una disyuntiva. Desde que murió Freddie - su rubia y aún más excéntrica abuela - las cosas han cambiado un poco para su familia. Sus padres - ambos artistas - han huido a Europa en busca de un sueño y le han dejado junto a Luke, su querido mellizo, en una destartalada mansión con espléndidas vistas al mar. Y como el dinero no es algo que abunde en la vida de dos jóvenes que recién terminan el colegio, ha llegado la hora de tomar cartas en el asunto y Violet decide alquilar la casa de huéspedes cercana a la mansión. Lo que nunca esperó es que su nuevo inquilino fuera River, un chico atractivo pero oscuro, de aquellos que sabes que debes evitar pero hay algo que te impide hacerlo. Cuando lo descubra... quizás sea demasiado tarde. Quizás el Demonio ya se haya inmiscuido en su vida y todo el mundo sabe lo difícil que es separarse de él una vez que se ha caído en la tentación. ¿O no?

Violet, hay verdades y verdades. Y algunas malditas verdades no deberían decirse en voz alta, pues el Demonio puede escucharte y venir por ti. Amen

Wink Poppy Midnight fue la primera novela que leí de esta autora y desde ahí supe que April G. Tucholke tenía un sello muy particular al momento de contar historias. Lo suyo oscila entre la novela gótica y el thriller, historias con ese halo de misterio contadas con una pluma casi poética, escogiendo palabras precisas para el momento adecuado, logrando crear escenas perturbadoras, de esas que logran que te dé más de un escalofrío. Con Entre el demonio y el profundo mar azul he tenido ciertos sentimientos encontrados: me gustó, pero quizás esperaba mucho más. La experiencia previa dejó el estándar un poco demasiado alto y aunque sé que las comparaciones son odiosas, no he podido evitarlo (al menos intentaré no explayarme demasiado).

Podríamos decir que esta novela se divide en dos partes: la primera, cuando conocemos a nuestros protagonistas e intentamos recolectar la mayor cantidad de pistas sobre River y la segunda, cuando entra un personaje a la historia que lleva a que se desencadenen una serie de hechos que dan paso a la verdadera acción de esta historia. Mi favorita es la segunda, pero hay que reconocer que sin la primera no se sientan las bases necesarias. Y aunque Tucholke se caracteriza por tener un ritmo cadencioso, tengo que reconocer que ese tiempo que se toma en recrear la ambientación tiene buenos resultados: Eco, el pequeño pueblito escogido como escenario, resulta apacible por las mañanas pero creepy y perturbador por las tardes / noches. Supongo que ya se imaginan en qué momentos se desarrolla la historia... 

Algunas personas no merecen vivir. Y, para ir un paso más allá, algunas personas tienen que morir

Creo que mi único problema con Entre el demonio y el profundo mar azul son los personajes (y el romance). Violet y River son los dos protagonistas, los que llevan el peso de la historia, los que se verán envueltos en una relación extraña que no sabría calificar si de romántica o de simbiótica. Una vez mencioné en alguna reseña que empatizar con los protagonistas era una pieza importante para disfrutar de un libro y pese a que ha habido casos en que he tenido que retractarme, esta vez me he vuelto a dar la razón. Violet gusta y a la vez no. Es distinta, peculiar y se aleja de los estereotipos, pero también peca de ingenua y por momentos se asemeja a una Mary Sue. Hubo escenas en que le daba toda la razón, pero otras en que era mejor zarandearla un poco. Dado que es nuestra narradora, conocemos de primera mano sus sentimientos y lo fácil que cae en las redes de River. Sí, admito que me apresuré en calificarlo de instalove (con el transcurrir de la trama se va aclarando el asunto), pero aún me queda ese regusto a relación apresurada. Quién sabe, quizás en la segunda entrega (¡casi olvido mencionar que es una bilogía!) se logre desarrollar mejor este punto.

River y su don tampoco están mal. Genera expectativa y muchas teorías, además que hay que reconocerle sus puntos de originalidad. Es malvado, lo sabe y no se esfuerza por ocultarlo. Miente con facilidad pero también puede ser directo. Es un personaje que podría llegar a querer si se le hubiera dado más profundidad, si pudiésemos conocer diferentes ángulos de su personalidad. Nuevamente, puede que la segunda parte trabaje más en ello. Por otro lado, Luke, Sunshine y Neely son buenos secundarios. Aportan su granito a la historia, pero muchos de ellos se quedan en lo superficial (¡vamos Violet, que no solo importan los líos de tu hermano o lo coqueta que es la vecina, sino que puedes contarnos algo más!). Neely es al que más futuro le veo, pero solo el tiempo lo dirá. 

Nadie vive todo una vida y no deja algún fragmento de ella cuando se va

Folclor popular, asesinatos, suicidios y la constante presencia del Demonio aderezan esta novela para lograr que sea aún más oscura. Lo cierto es que pese a los puntos en contra que yo haya podido encontrar, Entre el demonio y el profundo mar azul se llega a disfrutar porque la autora es capaz de envolverte con palabras, porque los capítulos son cortos y porque la edición es un plus a tomar en cuenta. ¿Que si lo recomiendo? Claro que sí, muy especialmente si buscas algo con lo que estremecerte y empezar a dudar de si realmente hay algo que lo controla todo en esta vida.


Muchísimas gracias a Distribuidora Inca por el ejemplar.

Reseña: El beso del infierno

8 mar 2017

El beso del infierno
Trilogía White Hot Kiss (1 de 3)
+ Datos sobre el libro | Lee los primeros capítulos

El Beso del Infierno es el primer libro de la trilogía White Hot Kiss, escrita por Jenifer L. Armentrout. Siendo una fiel seguidora de la autora y habiendo leído otras sagas de ella, no podía creer que esta serie estaba siendo traducida al español. Por eso, el mismo día que lo vi en librerías, aquí en Perú, no dudé en comprarlo. Y puedo decir que no me arrepiento en absoluto.

Layla la ha tenido difícil desde siempre: al ser mitad Demonio y mitad Gárgola, no cuenta con las habilidades sobrenaturales con las que nacen estos seres; por el contrario, tiene el poder de absorber el alma de una persona con tan solo un beso. Considerada una paria tanto para Gárgolas – también conocidas como Guardianes – y Demonios; ha tratado de ser lo más útil que ha podido para los primeros, quienes la han cuidado desde hace varios años. Ha crecido al lado de Zayne, un Guardián que la quiere como a una hermana, pero por quien ella ha desarrollado sentimientos más profundos. Asimismo, siempre ha creído que ellos tienen la razón y verdad absoluta sobre todo. Layla trata de llevar una vida normal, asistiendo al instituto, a la par que realiza algunas labores para los Guardianes. Su trabajo consiste en marcar a los Demonios, para que posteriormente puedan ser cazados y evitar el caos en la tierra. Sin embargo, su vida da un giro de ciento ochenta grados cuando Roth, un demonio, le salva la vida. Pero eso no queda ahí, sino que él empieza a seguirla, insistiéndole que es a ella a la que están tratando de matar y que le concierne a la parte que siempre ha negado: su lado demoniaco. Finalmente, ella decide escuchar a Roth y se empieza a cuestionar si todo lo que le han dicho es cierto, y empezando a cambiar su perspectiva sobre los demonios, quienes consideró sus enemigos. 

Tu vida no se centra en las cosas que no puedes hacer. Lo importante son las cosas que sí puedes hacer.

Sobre los personajes, me han agradado bastante y me he llegado a encariñar especialmente con uno (¿adivinan cual?). Primero, tenemos a Layla, una chica que a pesar de todas las adversidades y del futuro poco prometedor que le espera, no deja que eso la amilane. Por el contrario, ella ve en sus pocas habilidades una oportunidad para resaltar en su hogar. Es ese espíritu de guerrera, lo que permite la fluidez del libro, que avance con un ritmo que no decae al pasar los capítulos.  Zayne, por su parte, siempre se ha desempeñado de manera excelente como guardián y cree ciegamente en ellos, pero debido a los eventos que irán sucediendo en el libro, esa venda se irá cayendo de sus ojos. Aprecia mucho a Layla y por lo mismo, se preocupa por lo que le pueda pasar. A lo largo del libro, se puede apreciar bastante el lazo que los dos han formado y que se verá puesto a prueba por las decisiones de Layla. Y por último, el personaje con el que más me he encariñado: Roth. Es un demonio, pero no se dejen llevar por ese primer pensamiento que viene a su cabeza. En realidad, es arrogante y siempre tiene un comentario que hacer sobre la situación, incluso si esta es de vida o muerte. Aun así, es un personaje con un corazón inmenso, además tiene sueños, anhelos que desea cumplir, pero que se ve obligado a dejar de lado por sus obligaciones como ser sobrenatural. Y podemos ver ese gran corazón suyo, gracias a Layla y el efecto que tiene en él.

La relación entre Layla y Roth se desarrolla a lo largo del libro, y podemos ver como esta va de una amistad a algo más. Roth es bastante insistente cuando se trata de lograr sus objetivos y a Layla no le gusta ser dejada de lado, ni sin saber sobre lo que sucede. Esto usualmente ocasiona que ambos se terminen metiendo en más problemas de los que deberían. Y estas situaciones se las arreglan para hacernos reír, sin dejar de lado la seriedad que se merecen. Quizás, lo que más me gusto de esta pareja, es que Roth, intenta hacer ver a Layla, que el ser un Demonio (o en su caso, medio) no debe ser un problema o castigo. Por el contrario, debe encontrar la forma de darle la vuelta a la situación, buscando el lado ventajoso. Pero no nos olvidemos de Zayne, amigo de Layla desde pequeños y de quien ella ha estado enamorada por años. En este libro, no se lleva mucho lo que es el desarrollo de ellos como pareja, puesto que Zayne tampoco podría involucrarse románticamente con ella debido a sus obligaciones. Aun así, estos elementos nos dejan un ambiente bastante prometedor. Y antes que te lo preguntes, sí, hay un triángulo amoroso. En este libro nos dan un vistazo de lo que será, pero con seguridad se desarrollará en los siguientes libros con mayor profundidad.

Las personas con las almas más puras son capaces de las maldades más grandes. Nadie es perfecto, sin importar lo que sean o por qué bando luchen.

Pero como no todo puede ser color de rosa, hay ciertos elementos que siento que deberían pulirse. Al ser una trilogía, comprendo que la autora no nos podía soltar todo el meollo del asunto desde este primer libro. Aun así, tenemos muy poca información sobre el origen de nuestra protagonista. Además, nos dan un guiño sobre los que serán los problemas en los libros por venir, pero no puedo evitar querer saber más

Como es costumbre, Jennifer tiene la habilidad de atraparte desde el primer capítulo de la historia, pues comenzamos por lo alto. Y me alegra decir que esta aura de misterio no cesa en ningún momento de la historia, dando algunos momentos con situaciones amenas que logran atenuar un poco la situación. Además, la autora es capaz de manejar los elementos claves de esta historia, que son el romance, lo sobrenatural y el misterio de excelente manera, sin dejar de lado ninguno y con el tiempo / espacio necesario para no atosigar al lector. Cabe resaltar, que cada vez que pensamos que estamos en buen camino, un plot twist nos da la bienvenida. En conclusión, Armentrout se las arregla para darnos un mundo totalmente nuevo, pero nos hace sentir familiares con él de manera casi automática. Personajes con los que verdaderamente nos vamos a encariñar y una trama que no permitirá despegarse del libro en ningún momento en busca de respuestas. ¿Se animan a leerlo?


El camino de Sherlock y dos (o más) novelas para empezar a leer thriller o suspenso

6 mar 2017


El thriller o novela de suspenso siempre se encontrará entre mis favoritas: esa sensación de ansiedad e incertidumbre que ciertos autores son capaces de lograr me  fascina. El ritmo frenético, las escenas de acción, pero sobre todo los personajes ingeniosos hacen que una novela de este tipo se disfrute de principio a fin. No es un secreto que adore con todo mi corazón las novelas de Gillian Flynn (aunque lo suyo vaya más hacia el terreno psicológico) o que entre mis recomendados siempre se encuentren historias con estas características. Descubrir el thriller fue una de las mejores cosas que me han pasado en mi vida como lectora y gran parte de ello se lo debo a mi hermana por presentarme a Andrea Ferrari, cuyos libros son los protagonistas de esta entrada. El camino de Sherlock fue el primer libro de esta autora argentina que llegó a mis manos y - como en muchos casos - fue casi sin querer, como quien va a una librería de acompañante y termina llevándose a casa una historia que será la puerta a muchas otras. Es así como las dos nos vimos envueltas en esta trilogía juvenil catalogada dentro del Plan Lector de mi país (luego nos enteramos que había sido ganadora del Premio Jaén de Narrativa Juvenil)

Pero, ¿qué tiene esta historia que nos ha enganchado tanto? En El camino de Sherlock conocemos a Francisco Méndez, un chico de unos catorce años cuyo coeficiente intelectual está muy por encima de la media y cuya pasión en la vida es descifrar crímenes como lo haría el detective de Baker Street. Desde pequeño su familia ha intentado que el niño sea una pequeña celebridad debido a su inteligencia, pero ni el concurso de talentos ni los premios en la escuela dieron los resultados esperados (para suerte de Francisco, dicho sea de paso). Hoy en día el muchacho mantiene un perfil bajo en la escuela - o al menos lo intenta - y se rodea de su único y mejor amigo llamado Arturo, compartiendo experiencias cada cual a más extraña en su camino por imitar al famoso investigador. Hasta que un día se les presenta una verdadera oportunidad: en el barrio de Belgrano han ocurrido tres asesinatos y la policía es incapaz de dar con el culpable. Francisco está dispuestos a desenmarañar el caso y ponerse a prueba a sí mismo, retar esa inteligencia y demostrar que su obsesión por los detectives no es una pérdida de tiempo. Ponerse en la piel de S. Holmes no le costará mucho, pero ¿convencer a Arturo de que sea su J. Watson? Eso quizás le tome un poco más de tiempo, pero no hay duda de que entre los dos lograran ponerle punto final al caso... antes de que el asesino descubra quién está intentando revelar su identidad y vaya a por él 

¿Quién dice que una novela de suspenso necesita de muchas páginas para lograr crear una buena historia? Andrea Ferrari está para desmentir este hecho y prueba de ello son las tres novelas que componen esta serie, cada cual a más arriesgada, pero siempre manteniendo ese sello tan característico: nos trae un caso retorcido (incluso un poco espeluznante) pero lo aborda con inteligencia y sentido del humor, a través de una pluma ligera de leer. Francisco y Arturo serán nuestros guías, nuestros ojos para conocer la historia al completo. Sí, son dos adolescentes que tienen problemas de adolescentes (ya saben, escuela, tareas, padres pesados, quizás alguna chica por ahí...) pero no lo dejan de lado para ponerse en la piel de detectives e intentar salir airosos de ellos. Creo yo que ello son los dos puntos fuertes de estas novelas: protagonistas que van creciendo con los años, que van tomando nota de sus errores y evolucionan como cualquier chico de su edad. Pero Ferrari no se queda ahí, sino que logra que cada pieza encaje como un puzzle, dando a cada entrega la complejidad necesaria, otorgando peso también a los secundarios que vienen a aderezar el misterio que rodea cada página. Guiños a Sherlock Holmes hay por montones y tanto si eres fan de los libros de Conan Doyle como si no, estoy casi segura de que disfrutarás de cada una de estas historias. ¿Y un plus adicional? Que las novelas son cortísimas (creo que apenas llegan a las doscientas páginas cada una) y la edición es muy económica. Si eres de los que van en busca de una buena historia para comenzar con el género, aquí una recomendación (casi) infalible. 


La grata experiencia con El camino de Sherlock me predispuso a leer cualquier libro que Ferrari sacara al mercado. De esa manera me encontré con También las estatuas tienen miedo (bonita con ganas, por cierto) y Café solo, historias en las que se anima a explorar un poco más en el complejo, variado pero maravilloso mundo de los adolescentes que deben enfrentarse a los muchos cambios que están por venir en sus vidas. Sin embargo, no fue hasta que llegué a El hombre que quería recordar cuando me di cuenta de lo mucho que había extrañado esa vena más policial de Ferrari (lo curioso es que este título se publicó mucho antes que la trilogía anteriormente mencionada). Con esta nueva historia estamos, nuevamente, frente a un thriller: a sus diecisiete años, la experiencia de Santiago en el ámbito periodístico es casi nula y en el diario en el que practica tampoco le toman muy en cuenta... hasta que un día llega un desconocido con una historia casi inverosímil: ha despertado en un hospital y no recuerda absolutamente nada, ni su nombre, ni qué le llevó a la capital. Pero tiene un pedido aún más extraño: contar con nuestro protagonista para ayudar a descubrir su identidad, un hecho del que ambos saldrían beneficiados. El hombre podría recuperar sus recuerdos y Santiago hacerse notar frente a sus superiores. No parece un mal trato, ¿verdad? Al menos, hasta que descubren que alguien está tras la pista de ese hombre y quiere silenciarlo de una vez por todas. 

Leer a Andrea Ferrari siempre es divertido. En pocos capítulos es capaz de montar una historia con varios giros argumentales y las pinceladas necesarias de suspenso, sin descuidar a sus personajes. En El hombre que quería recordar nos encontramos frente a una premisa interesante, donde nada es lo que parece y cuyo final resulta un poco agridulce (pero no por ello es malo). Es cierto que se siente un poco menos trabajado que El camino de Sherlock y quizás la ausencia del sentido del humor que tanto caracterizaba a Francisco Méndez se echa un poco de menos, pero, siendo objetivos y dejando de lado las comparaciones, lo cierto es que esta novela también se disfruta mucho, especialmente cuando da EL giro inesperado y voltea completamente la tortilla. Soy fan de los autores que utilizan este recursos logrando que sea creíble y me alegra saber que Ferrari se incluye dentro de este grupo.

Casi para terminar, tengo que confesar que este es un post que tenía pendiente desde hace muchos (en serio, muchos) meses. El trabajar en una librería y con la campaña escolar en auge ha devuelto una idea a mi cabeza y quería compartirla con ustedes: ¿qué les parecería una zona dedicada a novelas de Plan Lector? ¿O quizás una sección para novelas cortas? Tengo varios títulos en la lista y me gustaría poder hablar de ellos. Sé que no serían reseñas propiamente dichas, más bien con un tono más parecido a de esta entrada. ¡Soy toda ojos para leer sus comentarios! Y por supuesto, no se olviden de decirme si ya leyeron a Ferrari anteriormente y si hay algún otro título que recomienden. Sería genial poder conversar con ustedes sobre ellos.

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