Let's talk: Anécdotas literarias

25 sept 2017


Las anécdotas son parte de la vida, y siempre las contamos para darle mayor peso a un consejo, o simplemente, para reírnos un rato de nosotros mismos. Esta vez he decidido contarles algunas anécdotas - a veces molestas y a veces cómicas - que han surgido en mi vida a raíz de empezar mi propia biblioteca.

• ESTAFAS LITERARIAS:
¿Alguna vez han sufrido una estafa al comprar un libro? Estoy segura que más de uno puede haberse visto burlado en su afán de comprar el libro que quiere, y que sospechosamente siempre está sellado – a veces con doble bolsa – y con un precio llamativo, lo cual nos hace sentir el impulso de comprarlo sin revisarlo exhaustivamente. Algo así me sucedió hace unos cinco años en la Feria del Libro Ricardo Palma. Estaba tranquila ojeando libros cuando de repente mi esposo vio un ejemplar que había estado buscando por buen tiempo. No estaba barato, pero conociendo sus gustos lo animé a que lo llevara – embolsado y sin revisar – a la casa. Pasó un año hasta que decidió leer este libro en particular, y cuán grande fue la sorpresa cuando finalizó la página 224 y no logró comprender el texto de la siguiente página… la cual tenía el número 257. Resulta que a este libro le faltan ¡33 páginas! A veces no sé si reír por la metida de pata o llorar por el dinero invertido. 

 GATO POR LIEBRE: Cuando empecé mi biblioteca solo soñaba con tener la colección completa de las Crónicas Vampíricas de Anne Rice que una amiga muy querida me había recomendado. Así fue como me dirigí a una conocida librería, y pregunté, inocentemente, por la saga a uno de los encargados: 

- ¿Anne Rice? - Me respondió el chico – Uy, justo ayer un señor vino y se llevó todo lo de esa autora, es sobre vampiros ¿no?
- Si, uno de los temas es el vampirismo – le respondí algo desilusionada.
- Podemos avisarte cuando los tengamos de nuevo, pero justo me ha llegado una saga de vampiros que está rayando… 

Luego de decir eso, el chico sacó como por arte de magia un libro de portada completamente negra y letras en rojo (imagínense la escena de la anciana ofreciendo una manzana a Blanca Nieves). Desilusionada como estaba, tomé interés en los libros que me recomendaba el joven con sospechoso entusiasmo, y decidí llevarme los dos primeros. Así fue como aparecí en mi casa no con los libros de mi amada Anne Rice, que compraría en años posteriores, ¡sino con la mitad de la saga Crepúsculo! 

Aquí sí solo me queda llorar, ¿y saben que es lo peor?... Al final no soporté la curiosidad y tuve que comprar Eclipse y Amanecer. Solo me queda decirme a mí misma: ¡Shame!

CAMBIO DE PRECIO INESPERADO: Los precios de los libros son cosa seria para los lectores. A veces compramos un libro por impulso a 70 soles ($22.00), para luego verlo meses después bajar sorpresivamente un 40%. Estos cambios han hecho que no compre nunca libros que recién han salido, pues entre exclusividad y precio, mil veces prefiero el precio. Es posible que esta tacañería literaria haga que no logre obtener algunos ejemplares porque se agotan. Sin embargo, a veces esta práctica tiene sus recompensas. Recuerdo que hace tres años escuché hablar sobre la saga de Eragon, libros que había visto en estantes a 80 soles ($25.00) en tapa dura. Fui a la Feria Internacional con toda la intención de comprarlos, pero dejé dicha compra para el final pues siempre voy directo al plato fuerte: las ofertas. Estaba yo paseando por el stand de una distribuidora cuando sentí que algo me miraba – no exagero, algo me miraba y era azul – era la portada de un dragón, y en letras plateadas decía Eragon. Lo saqué de la estantería para verlo mejor, le di vuelta para ver el precio: S/.20.00 ($6.00) y al ladito, estaban sus hermanitos: Legado y Brisingr, ¡al mismo precio! Tal fue mi sorpresa que pensé que había algún error por parte de la tienda, así que la más honesta yo, me acerqué a una encargada y le pregunté los precios. Ella dio vuelta a los libros y repitió los montos que aparecían en las bolsas. Tratando de que nadie notara mi repentina emoción, pagué lo más rápido que pude y huí del lugar. Por un lado sentí que había estafado a la tienda, y por otro, estaba muy contenta por la compra realizada.

Lamentablemente, no siempre la suerte está de nuestro lado, y eso lo sabe muy bien mi esposo. Para mi cumpleaños veintiocho, recibí de su parte uno de los regalos más lindos y caros de mi historia: La saga completa de Canción de hielo y fuego de George Martin, en la edición grande. Casi me caigo al piso cuando los tuve en mis manos, porque me encantaron y porque sabía cuál era el precio pagado: casi 500 soles ($154.00). Una semana después, era mi esposo quien por poco se desmaya cuando vio que recién habían llegado a Lima las versiones pocket con un costo muchísimo menor, casi un 50% menos. Aún nos reímos cada vez que recordamos semejante gasto, pero debo decir que sigo amando mis ediciones.

¿Les ha pasado algo parecido? ¿Tienen alguna anécdota literaria? Cuéntenmelas en sus comentarios. ¡Un abrazo!

Reseña: Hija de las tinieblas

19 sept 2017

HIJA DE LAS TINIEBLAS
La saga del Conquistador (1 de 3)
+ Datos sobre el libro | Lee los primeros capítulos

Su columna vertebral era acero; su corazón,
una armadura; y sus ojos, fuego

¿Les confieso algo? En mi cabeza siempre han coexistido dos Drácula. El primero es el vampiro, ese que Bram Stoker hizo popular y a partir de cuya figura se han creado una serie de historias - algunas mejor construidas que otras - en la literatura y el cine. El segundo es Vlad Tepes (también conocido como Vlad III, Vlad el Empalador o Vlad Drăculea), príncipe de Valaquia, que vivió entre 1431 y 1476 y cuya figura sanguinaria sirvió de inspiración para que Stoker creara su inmortal personaje. Admito que conocía más del primero que del segundo porque los vampiros nunca fueron lo mío (culpo en parte a CREPÚSCULO, aunque DRÂCULEŞTI me hizo cambiar un poco de perspectiva) pero apareció HIJA DE LAS TINIEBLAS con una propuesta interesante y yo misma me hice la pregunta, ¿por qué no? Sobretodo porque el enfoque es más de corte histórico - mi debilidad - y la fantasía pasa a un segundo plano. Y por la curiosidad de ver cómo es que Kierstin White ha transformado a uno de los personajes más recordados de la historia en una figura femenina, sin perder la esencia de salvaje y vengativa. 

En nuestra noche de bodas - expresó ella -, te cortare la lengua y me la tragaré. De esa manera, las dos lenguas que pronunciaron los votos matrimoniales serán mías y solo me habré casado conmigo misma. Lo más probable es que mueras desangrado, lo cual será lamentable, pero al menos no me transformaré en una viuda digna de compasión, sino que ocuparé el papel de ambos esposos

Ladislav - más conocida como Lada - es la primera hija legítima de Vlad Dracul, un príncipe déspota que nunca esperó que el primer fruto de su descendencia fuera mujer. Menos que su segundo hijo, Radu, fuera una criatura débil y asustadiza, que destacaba por su belleza y no por un feroz temperamento. Ninguno era lo que su padre esperaba de ellos y no le resultó difícil entregarlos como rehenes al sultán del Imperio Otomano. Los primeros años en su natal Valaquia marcaron la vida de ambos: Lada creció siendo una niña difícil de doblegar, capaz de manejar armas con la misma facilidad que cualquier soldado. Radu, por su parte, se refugió más en las lecturas, en conocer a las personas antes de juzgarlas. Al ser vendidos al sultán dejan todo atrás: su familia, su idioma, su propia tierra, para vivir en una corte donde lo mejor es pasar desapercibidos antes de que a alguien se le ocurra pedir sus cabezas. Ahí es donde conocen a Mehmed, el hijo del sultán, tercero en la línea de sucesión y compañero de aventuras de ambos hermanos.

HIJA DE LAS TINIEBLAS ha resultado ser mucho más de lo que esperaba. Es una novela compleja en muchos sentidos, pero también capaz de llegar al corazón. Admito que los primeros capítulos pueden ser un poco densos, pero son absolutamente necesarios para situar el contexto, el tiempo y empezar a modelar a los personajes. La autora se ha tomado su tiempo para recrearlos, para esculpir sus características con el paso de los años. Vemos a Lada crecer, de ser una niña rebelde a una mujer de armas tomar, capaz de infligir dolor, de cerrar su corazón y de dejarse guiar siempre por la lógica… pero también una joven que empieza a descubrir los cambios de su cuerpo y cómo este puede ser más que un mero instrumento para la batalla. Es impulsiva y salvaje (y por momentos da ganas de darle un sopapo para que deje el orgullo de lado), pero siempre es ella, Lada en toda su esencia. Radu no se queda atrás: puede que no sea un luchador de armas, pero la estrategia y las palabras son su as bajo la manga. En los primeros capítulos me resultó un chiquillo más bien quejumbroso, pero conforme crece y evoluciona es imposible no querer esa faceta de niño que siempre tendrá en él. Y Mehmed, que pasa de ser un hijo más del sultán a un personaje importante en el Imperio poco a poco empieza a ganarse el corazón del lector, a la par que el de los dos hermanos Draculesti. Porque sí, estamos ante un triángulo amoroso poco convencional, en el que cada decisión, cada palabra o cada secreto puede romper el corazón de uno u otro personaje. He sufrido como pocas veces con los últimos capítulos y me arrepentí de haber pensado, por un momento, que si la novela hubiera tenido menos páginas sería mejor. No, no podría haber sido posible. La autora ha jugado bien sus cartas: se ha tomado su tiempo al construir la historia y por eso ha logrado que cada personaje conecte con el lector, porque vemos sus distintas facetas, porque conocemos sus puntos fuertes y sus debilidades, porque los vemos tan humanos que casi parecen reales. Bien logrado, Kierstin White.

Si Lada simbolizaba la maleza cubierta de espinas que germina en medio de un cauce agrietado y seco, Radu representaba a la delicada y dulce rosa que se marchita si las condiciones que la rodean no son perfectas.

No contenta con tremendos personajes, White nos regala un escenario magnífico y un argumento cuanto menos intrigante. Sí, reconozco que aquí no puede haber spoilers de los grandes (la historia sigue siendo historia, por mucho que ahora tengamos a un Vlad Tepes en versión femenina) y si alguien se pone a husmear un poco en Wikipedia, sabrá más o menos qué le depara la vida a cada personaje. Y digo más o menos porque la autora se ha tomado ciertas libertades, pero ha respetado gran parte de los hechos históricos. En HIJA DE LAS TINIEBLAS nos presenta un poco de todo: desde intrigas políticas y palaciegas (qué interesante me resultó las jerarquías del Imperio Otomano y los tejemanejes que se cuecen en el harén del sultán), conflictos entre hermanos (era inevitable que Lada y Radu chocaran en más de una ocasión), batallas y guerra (White no se corta al momento de hablar de violencia y sangre) y por supuesto, la dosis necesaria de misterio que entreteje a la novela y la pizca suficiente de romance - del doloroso - para aderezar el libro. Quizás el punto menos fuerte de esta novela sea el estilo de narración de la autora, pero se nota que ha habido una evolución entre los primeros capítulos y los últimos. Sin embargo, con una mezcla como la que nos ofrece es difícil que un lector de fantasía épica, de histórica e incluso uno que nunca ha leído del género caiga en sus redes. ¡Y vaya con el final! Hace tiempo no encontraba uno que, sin ser muy abierto, deja con ganas de ir enseguida a por la siguiente entrega.

¿Juego de Tronos en versión juvenil y situado en el Imperio Otomano? Ese es el argumento que he escuchado / leído en varias críticas y lo cierto es que, si vas con esa premisa en la cabeza, mucho me temo que HIJA DE LAS TINIEBLAS no alcanzará las expectativas. Mientras la serie de Martin es fantasía épica y novela río, la propuesta de White va más bien por otra línea y es capaz de brillar por sí sola. Dejen las ideas preconcebidas de lado y denle una oportunidad a este libro, creo que tiene los componentes necesarios para convertirse en una saga interesante, a la que desde luego seguiré la pista. 

Los mejores libros que leí en la escuela

15 sept 2017


A veces extraño mucho mis días en el colegio, especialmente cuando casi no saco la nariz de los aburridos textos de economía que tengo que leer en la universidad. En la escuela, yo creía que los libros que me obligaban a leer eran horribles; quizás porque nunca me gustó que me impusieran las cosas que debía leer, o tal vez porque odiaba los controles de lectura al final de cada mes. Sin embargo, ahora que la nostalgia me agarra desprevenida, me doy cuenta que no todos los libros del colegio eran tan malos como pensaba. Así que, a un año de haberme graduado de la secundaria (y de haber querido regresar en alguna ocasión), es hora de combatir la nostalgia desempolvando esos libros que me hicieron pasar un buen momento. Por eso, hoy les traigo los seis mejores títulos que formaron parte de mi Plan lector en el colegio.

• HAY PALABRAS QUE LOS PECES NO ENTIENDEN: Francisca, una niña que se siente muy sola, recibe por su cumpleaños lo que siempre ha querido tener: un perro. Por desgracia, su padre no le deja quedárselo, así que ella debe pedir la ayuda de Julián, un muchacho que trabaja en la tienda de mascotas de su abuelo, para encontrarle un nuevo hogar. Lo que Julián no imagina es que Francisca, hará grandes esfuerzos para enamorarlo y así, cuando sean novios, él acepte quedarse con su perro para siempre. María Fernanda Heredia, la autora, es una de esas escritoras con las que crecí. Sus libros son sencillos y están llenos de humor, son excelentes para una lectura ligera. Pero lo mejor de todo es la historia de amistad y amor. Perfecto para reír un rato y calentar un poquito el corazón. 

• NO PREGUNTES A MOZART: Uno de mis primeros acercamientos a la Segunda Guerra Mundial. Aquí se narra la historia de Lesley, una joven periodista que debe entrevistar a Paolo Levi, un violinista que celebrará sus cincuenta años en Venecia. sin duda, esta es la entrevista más importante de su carrera y no debe arruinarlo. Casi sin saber cómo, Lesley termina siendo la primera persona a la que Levi le cuenta la historia de sus padres cuando fueron prisioneros en los campos de concentración y cómo la música, especialmente la de Mozart, los salvó. Este libro es una preciosidad, es breve y se lee rápidamente. No, no es tan crudo como El niño del pijama a rayas o Cartas de la Werhmacht, pero Michael Foreman, el autor, nos ofrece personajes con los que es fácil empatizar y, sin duda, dan esperanza.

• CUÍDATE, CLAUDIA, CUANDO ESTÉS CONMIGO: Jota es un joven con dotes de escritor y está enamorado de Claudia, a quien dedica un poemario completo. Pero ¿es eso suficiente para conquistarla? ¿O a caso ella tomará sus sentimientos y los arrojará por una ventana? Esta novela fue escrita por el peruano José Luis Mejía y me hizo tener fe en la literatura peruana, de la que yo no era nada fan en el pasado. La narrativa es fresca y se mezcla la prosa con algunos poemas, además, nos habla de la amistad, la confianza y, por supuesto, el primer amor. Una vez que se le agarra el ritmo, uno no se puede despegar de este libro.

• LA BRUJA DE ABRIL Y OTROS CUENTOS: Ray Bradbury nos ha dejado libros alucinantes. Ciencia ficción, fantasía, terror… todo lo escribía muy bien. El libro que les presento es una serie de relatos muy breves. Todos de temática diferente y sin ninguna relación entre ellos. Aquí se encuentra de todo, desde habitaciones que cambian de forma según los deseos malvados de unos niños, hadas que quieren enamorarse y la vida en Marte mucho tiempo después, cuando la tierra ha sido casi destruida por los blancos, mientras que en el Planeta rojo, los negros viven en paz. Mi cuento preferido ha sido por mucho “El otro pie”, pero todos son una delicia. 

• CRIMEN Y CASTIGO: Este es uno de los mejores libros que he leído en toda mi vida. Después de leer una versión resumida en el colegio, quedé obsesionada y tuve que conseguirlo completito. No es nada ligero y a muchos les cuesta agarrarle el gusto; sin embargo, cuando te familiarizas con la pluma de Dostoyevski, no puedes parar de leer. Narra la historia de un hombre que ha asesinado a una vieja usurera y cómo es su proceso de arrepentimiento y lo mucho que debe padecer para pagar por su crimen. La novela de mi escritor ruso preferido está repleta de honestidad, amor, perdón, y escenarios tan maravillosos que sientes que has llegado a la Rusia de Rodion Romanovich. 

• EL LUGAR MÁS BONITO DEL MUNDO: Quiero terminar esta lista con un libro que leí en mi primer año de colegio y del que recuerdo cada palabra de memoria. Es el más corto de esta lista, pero también es una joya. Aquí conocemos a Juan, un niño de Guatemala que, cuando su madre lo abandona, debe vivir con su abuela y sus tíos, y aprender el oficio de limpiabotas. Juan es un personaje hermoso, lleno de vitalidad y entusiasmo, aunque, para ser tan pequeño, ha sido muy herido. La abuela, por su parte ¡cómo me ha encantado! No puedo decir mucho más sobre este libro porque habla por sí mismo. No hay excusa para no leerlo porque se termina incluso en media hora. Les dejo una frase del libro, para ver si se animan a darle una ojeada. “Allí donde hay alguien a quien se quiere muchísimo y donde hay alguien que nos quiere de veras, ese sí que es el lugar más bonito del mundo.”

Y esas son mis recomendaciones del día. ¿Han leído alguno de estos libros? ¿Cuál es el que más les ha llamado atención? 

El mundo de Roald Dahl no es solo para niños

13 sept 2017


¿Pueden los adultos disfrutar de las novelas para niños? Esa fue la gran pregunta que me hice antes de plantearme escribir este post. Se ha dicho y escrito mucho sobre la literatura infantil, sobre su gran valor para incentivar a que los niños se acerquen a la lectura como un espacio de entretenimiento y esa premisa la hace fundamental. El punto es, ¿son los niños los únicos lectores de novelas infantiles? Para responder a esta pregunta me reté a mi misma a leer una novela catalogada dentro del rubro infantil y mi elección fue Roald Dahl. Subrayo lo del desafío porque pensaba que las novelas de este autor no me iban a encandilar. Craso error, porque no es la primera vez que mis prejuicios se adelantan a la experiencia pero ese ya es otro tema.

No hay duda de que Dahl es un autor prolífico y de todas las novelas escogí MATILDA, una de las más emblemáticas, por detrás de CHARLIE Y LA FÁBRICA DE CHOCOLATE. La elegí por lo mucho que me habían comentado de ella y por la curiosidad que la propia protagonista me generaba: una precoz niña lectora ignorada y poco entendida por su familia; un hecho que le suele suceder a muchos los lectores. ¿Qué puedo decir de MATILDA? Que simplemente me atrapó. Me olvidé de que suele ser catalogada como una novela para niños y no pude dejar de leerla. Me sentí parte de su mundo, viví en su cabeza y atisbé cada uno de sus pensamientos. ¡Quién diría que la que más se rehusaba a leer esta novela se engancharía con la historia!. Matilda, siendo una niña tan pequeña - pero tan inteligente - tiene que vivir y sobrevivir a situaciones bastante hostiles en la casa, en el barrio e incluso en la escuela. ¿Que si tiene cliclés? En lo absoluto. Matilda demuestra en cada capítulo su tenacidad, su inteligencia y esa sabiduría que sólo los niños pueden tener. Es un personaje con el que no resulta difícil encariñarse pero no porque sea perfecto, sino todo lo contrario. Es tan imperfecto que cada momento vivido a su lado hace que sea una genialidad.


¿Que tiene Dahl que lograr atrapar a niños y adultos con sus novelas? Esa pregunta estuvo rondando en mi cabeza antes de escribir estas líneas y he llegado a la conclusión de que es porque él se toma muy en serio la novela. “El que no cree en la magia nunca la encontrará”, dice, y creo que eso se siente en cada párrafo que escribe: su intención es que el lector sea parte del mundo que crea a través de las palabras, que no prejuzgue y se deje envolver en las situaciones que afrontan sus personajes. Un niño podrá disfrutar de sus historias y llegará al final con una lección a tener en cuenta. Un adulto conseguirá ver esos mismos momentos y analizarlos con mayor profundidad: ¿Cuál puede ser la motivación de un adulto para hacerle la vida infeliz a un niño? ¿Por qué creemos que sabemos todo de la vida, cuando son ellos los que nos dan las grandes lecciones? ¿Somos acaso, los adultos, quienes inculcamos los miedos y temores en los niños y no dejamos que disfruten esta corta pero intensa etapa?

Creo yo que son varios los factores que llevan a que una novela trascienda las barreras del tiempo y que la edad, el momento o el lugar donde uno esté sean detalles secundarios, que no limitan el disfrute de una historia. ¿Que Roald Dahl escribe novelas para niños? Para mí esa es una etiqueta innecesaria. Dahl escribe para dejar una lección, para que a través de situaciones divertidas - a veces rayando cierto punto de fantasía - el lector se tome un momento para reflexionar sobre sus propios actos y con ello, ser una mejor persona.

Si bien gran parte de su producción la componen novelas de corte infantil, Dahl también ha escrito cuentos y novelas para un público más adulto. Fue un hombre con una vida llena de logros pero también de dificultades, pero que no mermaron su capacidad de contar buenas historias que se quedarán en la memoria de quienes tenemos el gusto de leerlas. ¿Tienes tú alguna novela preferida de este autor? ¿Lo conociste con Matilda o quizás Charlie y la fábrica de chocolate? Quedo pendiente para leer sus comentarios



Review: IT (Eso)

11 sept 2017


IT era sin duda una de las películas más anticipadas del año (me incluyo), razón por la cual las expectativas eran altas, muy altas. No he tenido la oportunidad de leer el libro - aún - por lo que las siguientes líneas van de parte de una lectora que también es fan de las películas de terror, pero que ha ido al cine a verla y no juzgarla como adaptación, sino como espectadora del género. La miniserie de 1990 resultó intrigante para la época y aunque no conservo en la memoria cada uno de los detalles, la historia de Pennywise es de esas que difícilmente se olvidan. Y con esa premisa, no podía perderme este remake que llega, curiosamente, veintisiete años después. 

IT, esta vez dirigida por A. Muschietti, comienza en Derry, un pequeño pueblo que ha empezado a registrar extrañas desapariciones de niños. Cuando el pequeño Georgie también es víctima de ese suceso, su hermano mayor - Billy - se da cuenta de que necesita hacer algo. Junto al autodenominada "Club de los perdedores", un grupo de niños víctimas de bullying escolar, tratarán de desentrañar el misterio que rodea a la ciudad y sus peripecias les llevarán a darse cuenta que se enfrentan a Pennywise, un peligroso payaso que se alimenta del miedo de las personas. La gran pregunta ahora es, ¿serán capaces de hacer algo o serán las próximas víctimas?


Si hay algo que debería subrayar sobre esta nueva película, es la capacidad que posee para mantener al espectador al filo de su asiento esperando por más. Cada uno de los siete pequeños protagonistas poseen una historia de trasfondo que se entremezcla con los misteriosos sucesos que acechan a Derry. Rescato sus actuaciones porque resultan verosímiles, lo cual es bastante satisfactorio teniendo en cuenta lo complicado que puede ser trabajar con niños, mas aún tratándose de una película de terror. La película cuenta con un buen desarrollo de la trama, que se logra llevar a lo largo de las poco más de dos horas que dura, manejando las dosis necesarias de thriller y de misterio, pero también con un par de momentos graciosos que logran calmar la tensión que pueda ir acumulándose en la sala. Vamos a ser honestos: creo que IT logra que el espectador salte del asiento un par de veces (e incluso habrá escenas en las que se tenga el impulso de cerrar los ojos de miedo), pero más allá de contadas ocasiones, no es un filme que cause pesadillas por el resto del año. Sí, es más sangrienta que la adaptación anterior, pero no abusa de los recursos y junto a un buen soundtrack crean una atmósfera más de terror psicológico, más de dejar al espectador analizando. Creo yo que ahí radica el encanto. 

Otro punto que me gustaría resaltar es el desenlace de la historia: por un momento temí que iba a ser el típico final en el que todo se resuelve de manera mágica y poco creíble en los últimos cinco minutos, pero mucho me alegra saber que no es el caso de IT. A diferencia de muchas otras películas, esta se toma su tiempo para desarrollarse y poner todos los elementos en su lugar dándonos una muy buena secuencia final, que nos mantiene enganchados. Eso sí, deben saber que los productores optaron por dividirla en dos películas: esta primera, que nos presenta al Club de los Perdedores y una segunda (confirmada y en camino) que retoma los hechos veintisiete años después. 


No obstante las buenas críticas que está teniendo este remake, hay un par de detalles que, personalmente, me dejaron un poco disconforme. Tenemos a los siete niños del Club de los perdedores que llevan el peso de la historia (y siete no es un número precisamente pequeño), por lo que es difícil conseguir un balance y lograr explorar la historia personal de cada uno. Pero sentí que un par de ellos se abordaron de forma casi superficial (¡hubo un momento en que no recordaba bien su nombre!) por lo que cuesta tomarle cariño y conectar con el personaje.  El segundo detalle que me dejó un sabor amargo fue que sentí un vacío en cuanto a Pennywise. Nuestro antagonista es fundamental en la trama, pero me hubiera gustado saber un poco más de su historia. Esto lo he disculpado porque se viene la segunda parte, por lo que imagino que era necesario tener material disponible para poder desarrollarlo en esta secuela.

Soy consciente de que lograr una adaptación totalmente fiel al libro es una misión imposible, no por nada posee más de mil páginas y es uno de los libros más aclamados del autor. Por tanto, creo que nos podemos dar por bien servidos con que hayamos tenido una nueva adaptación que esté recibiendo tan buena aceptación por la crítica y que además haya contado con la mismísima aprobación de Stephen King. Si el propio autor lo aprueba, ¿no es un punto más a favor de esta adaptación? 

En conclusión, IT es una película que no pueden perderse, sea porque han leído el libro y desean saber que tal está la película como adaptación o porque les encanta el género de terror y quieren comprobar si este nuevo Pennywise realmente resulta espeluznante. Cual sea la razón, los invito a unirse al Club de los perdedores y desenterrar los misterios de Derry. Y, por supuesto, animarse a empezar con el libro (mi próxima meta aunque me tarde un año en terminarlo) mientras esperamos la segunda parte. 

Reseña: Cartas a los perdidos

8 sept 2017

CARTAS A LOS PERDIDOS
Mi puntuación: ★ ★ ★ 
+ Datos sobre el libro | Lee los primeros capítulos

El dolor emana de cada palabra como una llamarada. 
Ese dolor que te hace escribir cartas a alguien que nunca las va a leer.  Ese dolor que te aísla. 
Ese dolor que puedes asegurar que nadie más ha sentido, jamás

Para Juliet Young, la fotografía siempre fue una parte muy importante de su vida. Su madre fue su modelo a seguir, una mujer que logró saborear el éxito y el reconocimiento antes de morir de forma trágica en un accidente de tránsito. Toda esa admiración que Juliet sentía por ella ahora sólo le ha dejado un vacío inmenso, una lucha a la que ella no quiere sumarse porque sabe que jamás será capaz de volver a tocar una cámara, porque nunca llegará a ser ni la mitad de buena que lo fue ella. Lo único que ahora puede hacer es escribir cartas – llenas de desesperación y anhelo – y dejarlas en su tumba a manera de catarsis. ¿Qué si está yendo demasiado lejos? Cada quién tiene su propia forma de lidiar con el dolor y el de ella lleva también matices de culpa por ser incapaz de dejar que las cosas transcurrieran como debían hacerlo.

Por su parte, Declan Murphy grita problemas por donde se le vea. Cumplir una condena de trabajo comunitario en el cementerio local es solo la menor de sus complicaciones, el verdadero desafío le espera siempre en casa: una madre emocionalmente inestable y un padrastro que se inmiscuye en donde no le llaman. Y no, no es el típico chicho malo (pero guapo) con pasado oscuro, sino que es más el chico normal a quién los rumores pintan peor de lo que debería y que debe lidiar con sus propios problemas (como todos) al que se añade un nuevo: acaba de encontrar una carta en el cementerio y contra toda lógica ha terminado leyéndola. Y lo que es más, incluso ha llegado a responderla, porque la intensidad que destilan las palabras escritas cala demasiado hondo para dejarlas pasar. De esta manera, ambos empiezan una especie de correspondencia anónima, una vía en la cual poder ser honestos sin temor a ser juzgados y la posibilidad de encontrar en el otro una fuente de comprensión. Alternando entre el punto de vista de Declan y Juliet, la historia transcurre a la par que ambos van contando más detalles de sus propias vidas y, sobre todo, dando la posibilidad de abrirse para poder sanar las heridas.

¿No te parece curioso que la gente hable de “perder” a alguien, como si no supieran donde esta? Pero quizás se trate de un significado distinto de “perder”, en el sentido que uno no sabe a dónde se fue

Desde que vi Cartas a los perdidos, supe que había encontrado una historia que llega al corazón, de esas que nos conmueven y nos hacen reflexionar sobre nosotros, sobre quienes nos rodean, sobre la vida misma. Confieso que después de leer la sinopsis estuve bastante confundida: ¿serán quinientas páginas capaces de llenar una historia de manera eficaz, sin alargar (o acortar) innecesariamente la trama? A manera de respuesta, les puedo decir tres cosas con total seguridad: la sinopsis le queda pequeña para todo lo que en realidad abarca este libro; la historia me hizo desear que Cartas a los perdidos tuviese más páginas; y, por último, he amado cada segundo de lectura.

Cartas a los perdidos no es, ni de lejos, la típica historia romántica que podemos encontrar en muchas novelas juveniles. Al contrario, aborda diferentes temáticas y lo hace con fuerza y de forma directa. Se habla de muerte, de culpa y remordimientos. Y no necesariamente es una novela triste y lacrimógena, sino que da espacio para el autodescubrimiento y las segundas oportunidades con otros y, especialmente, con nosotros mismos. Uno de los puntos positivos que he encontrado en la historia es que ambos personajes tienen la misma importancia en el libro. No son personajes creados con la intención de hacer brillar al otro, sino de ambos tener el protagonismo y apoyarse mutuamente. Cabe agregar que tanto Juliet como Declan son personajes con bastantes capas y profundidad en la historia. Sobre los secundarios puedo decir mucho, pero siento que podría entrar mucho en detalles con riesgo de spoiler. Lo que sí les puedo decir, es que hay algunos personajes que van a odiar y otros que amarán, pero sobre todo, les recomendaría que no se dejen llevar por las primeras impresiones. Aun así, puedo afirmar que Rev, el mejor y único amigo de Declan, ha sido mi personaje secundario favorito, un chico que también tiene su propia historia por contar. Con todo esto dicho, me animo a decir que mi parte favorita ha sido descubrir como el dolor y la culpa pueden ser mejores antagonistas que cualquier otro villano de carne y hueso.

A veces pienso que el destino conspira en contra de nosotros. 
O quizás el destino conspira con nosotros

Sobre el estilo de escritura de la autora, tengo que avisar que lo he disfrutado bastante. Cada capítulo empieza con una carta/correo y con el punto de vista del destinatario del mismo. A pesar que se tratan temas que son fuertes y delicados, la historia es bastante fácil de leer gracias a la pluma de Kemmerer. Hubo un momento en el que quería que el libro siguiera y siguiera, pero me he dado cuenta que no hubiese podido disfrutar tanto de esta historia si la hubiesen alargado innecesariamente. Además, el próximo año saldrá un libro dedicado exclusivamente a Rev, por lo cual ahí podremos descubrir más sobre este personaje y cumplir mi sueño de saber un poquito más sobre lo que sucedió con los protagonistas (espero).

El libro me ha hecho reír por momentos, tener un nudo en la garganta con otros, pero sobre todo reflexionar bastante sobre la culpa y el perdón. Creo que es un libro con el que todos se pueden sentir identificados, sea por algo que les ha pasado o que les está pasando. Como he mencionado, se trata de una historia bastante profunda y que va mucho más allá de lo que parece de buenas a primeras, nunca pude dar nada por sentado, cada giro me demostraba que la autora aún tenía mucho más que contarnos. Puedo decirles, con el corazón en la mano, que ha sido una de mis mejores lecturas de este año.

Si no puedo culpar al destino, ¿Quién tiene la culpa?

No quiero terminar esta entrada sin dejar de recomendarles este libro a todos: léanlo y disfrútenlo tanto como yo lo he hecho. Por ahora, yo me iré a seguir esperando a que el libro sobre Rev salga lo antes posible para poder seguir disfrutando de las historias de esta autora. 

Reseña: El nido

6 sept 2017

EL NIDO
Mi puntuación: ★ ★ ★ 

No hagas promesas que no puedes cumplir…
Para muchos niños, la llegada del verano es sinónimo de alegría, de tardes de juego con los amigos del barrio, de domingos familiares disfrutando de una deliciosa comida. Para Steve no lo es. Su hermano recién nacido tiene una extraña enfermedad y sus padres pasan todo el tiempo posible en el hospital y entregados a su cuidado, buscando la forma de que su pequeño sobreviva a un diagnóstico incierto. Y las avispas no hacen sino incrementar esos días de incertidumbre. Avispas en sus sueños, avispas en el jardín de su casa. El enorme avispero que hay en el tejado está creando cierta paranoia en su cabeza y saber que puede de algún modo escucharlas no ayuda a superarlo. Cuando en un sueño (¿o una realidad?) alguien parece ofrecerle la solución a sus problemas y el de su pequeño hermano, Steve lo piensa seriamente. Decir “sí” es todo lo que tiene que hacer, pero bien dicen que una palabra puede resultar peligrosa. ¿Pero pesa más su amor por la familia o su miedo a que todo sea un espejismo? 

Acepto que la propia sinopsis es rara y no me sorprendería si han entendido tan sólo la mitad de lo que les he contado (yo captaría menos que eso, porque todo resulta un poco confuso). Pero así es como empieza El nido, una historia a medio camino entre el cuento y la novela, que aún no sé si calificar de middle grade, de thriller o de puro terror psicológico. Porque si algo es cierto es que me ha escarapelado la piel en varios momentos, casi como si lo estuviera viendo frente a mis ojos (¡y con lo miedosa que soy, ya se imaginan!). La incertidumbre es una constante a lo largo de todo el libro: ¿quién es realmente tal o cual personaje? ¿Son las voces que oye Steve sueños, alucinaciones o acaso tienen un pizca de verdad? Pero sobre todo, ¿qué pintan las avispas en todo esto? 

A veces no nos veía y otras nos miraba fijamente. A veces tenía los ojos semiabiertos; a veces bien abiertos y le brillaban de curiosidad. Pero cuando yo lo miraba, lo que pensaba casi siempre era en las cosas que no podía ver: todo lo que andaba mal en su interior.

El nido es demasiado corto para contar muchos detalles y lo suficientemente enmarañado para resultar atrapante. Capítulos cortos, giros a cada cual más extraño y un final cargado de adrenalina y situaciones que me han dejado agradeciendo por estar al otro lado del papel. Por alguna razón - extraña, como casi todo en este libro - se me venía a la cabeza Un monstruo viene a verme porque en algo se parecen estas dos historias: protagonistas de doce años, un familiar con una grave enfermedad y una evolución rápida, dolorosa, que los lleva a ver el otro lado de la vida para aceptar aquello que llevan tiempo guardando dentro. Eso sí, mientras el primero es capaz de conmover hasta las lágrimas, El Nido te lleva a correr a por un insecticida en caso de que todo sea extrañamente real.... y eso no lo hace un mal libro, porque si un autor es capaz de jugar con la mente de esa manera es porque ha jugado bien sus cartas. 

Tengo que decir que he encontrado en Kenneth Oppel un autor interesante al que pienso seguirle la pista. He indagado por ahí que otros libros suyos siguen esta extraña pero curiosa fórmula, historias que no se encasillan en un género y que puede dar escalofríos al plantear situaciones cotidianas desde enfoques espeluznantes. Ya les estaré contando si es que me animo a probar otra novela suya. De momento, dejo mi recomendación para El nido (además, ¡la edición es ilustrada!), porque ha resultado intrigante y porque necesito comentar con alguien de ese libro. No creo ser la única que le ha dado varias vueltas en la cabeza. ¿o si?

Cómo empezar a leer ciencia ficción

3 sept 2017


No sé si a alguno le habrá pasado, pero yo era una joven inocente que solía pensar que la ciencia ficción iba sobre “navecitas” y “alienígenas”; y por este motivo nunca me animaba a tocar ningún libro que hablara sobre estos temas. Sin embargo, gracias a la insistencia de mi esposo - cuyas recomendaciones las veía hasta en la sopa - por fin me animé de mala gana a leer una historia corta de quien hoy es uno de mis escritores favoritos del género: Isaac Asimov.

Gracias a Asimov, cuyo libro terminé en un solo día, caí enamorada e ilusionada cual colegiala, y decidí que quería leer más del autor y saber más del género. Luego de investigar llegué a la conclusión de que sí había leído ciencia ficción, solo que no me había dado cuenta. Quizás alguno de los que lee estas líneas se habrá sentido en algún momento como yo, con un prejuicio total hacia la ciencia ficción que no les deja aventurarse a conocer este extenso y emocionante género. Es por eso que hoy quiero darles tres recomendaciones para empezar a leer ciencia ficción.

¿SOFT O HARD?
Lo sé, puede que el título suene algo raro, pero lo cierto es que la Ciencia ficción se divide en Soft o Hard (así que no me juzguen). La ciencia ficción hard basa sus historias completamente en los avances tecnológicos, utilizando explicaciones que derivan de las ciencias duras como la física, matemática o química, y que son total o parcialmente aplicables a la realidad, lo que puede hacer que las obras de este estilo resulten algo densas y con poca acción. Por el contrario, la ciencia ficción soft es aquella en donde podemos observar grandes avances tecnológicos pero la historia se centra mayormente en los personajes y las situaciones que estos generan. Aquí se utilizan las ciencias blandas como la antropología y sociología para enriquecer la trama.

Si te gusta el tema tecnológico y las ciencias duras, empezar por la ciencia ficción hard no significará mayor problema, pero advertidos están que son libros densos. Un buen ejemplo de ciencia ficción dura es la trilogía marciana de Kim Stanley Robinson, una obra que prácticamente es un manual de terraformación para adaptar el planeta rojo a las necesidades humanas. Por el contrario, para los-anti matemáticas (como la que escribe), les recomiendo empezar por la ciencia ficción soft, pues es más fluida y nos muestra los avances tecnológicos sin profundizar mucho en sus detalles, conservando así el interés del lector. Puedo mencionar aquí sagas muy interesantes como DUNE de Frank Herbert o EL JUEGO DE ENDER de Orson Scott Card.

Pero si pensaban que las divisiones de la ciencia ficción quedaban aquí, pues qué equivocados que estaban. Cuando dije “extenso y emocionante género”, lo decía en serio.


ESCOGE EL TEMA
La ciencia ficción también se puede dividir por temas - y créanme son bastantes - pero no se preocupen, este no es un post para aburrirlos a morir con teoría. La idea es que se animen a leer el género, es por esto que solo voy a mencionarles las divisiones más conocidas, y creo que será en este momento en que algunos de ustedes se darán cuenta que ya han leído ciencia ficción antes…

• STEAMPUNK: Es un subgénero en donde todo es ambientado en la época victoriana pero con tecnología futurista. Como ejemplos tenemos a las valiosas obras de Julio Verne como VEINTE MIL LEGUAS DE VIAJE SUBMARINO o DE LA TIERRA A LA LUNA. De las novelas más juveniles, podría mencionar la trilogía LOS ORÍGENES, de Cassandra Clare. 

• SPACE OPERA: Aquí si vamos a ver navecitas pues en este subgénero podemos encontrar batallas y aventuras en el espacio. Puedo mencionar como ejemplo el libro de Arthur Clarke 2001: ODISEA EN EL ESPACIO.

• ROBÓTICA: como su nombre lo dice, estas obras hablan sobre la creación de robots y la inteligencia artificial. Si les gusta esta temática les recomiendo mucho el cuento EL HOMBRE BICENTENARIO, de Isaac Asimov. Si buscamos títulos más juveniles, creo que CINDER, de Marissa Meyer caería bien en este subgénero.


• APOCALÍPTICA Y POST-APOCALÍPTICA: Estos libros nos plantean un mundo arrasado y decadente, en donde la humanidad lucha por sobrevivir… ¿les suena conocido? Pues sí, aquí entran las famosas distopías como los LOS JUEGOS DEL HAMBRE, de Suzanne Collins, METRO 2033 de Dmitry Glukhovsky o DESPIERTA, de Beth Revis.

• UCRONÍA: Este tipo de obras juegan con las líneas temporales e imaginan qué hubiera sucedido si algún evento del pasado hubiera sido distinto de lo que en realidad fue. Por ejemplo tenemos EL HOMBRE EN EL CASTILLO, de Philip K. Dick, en donde la Segunda Guerra Mundial fue ganada por los Nazis; y ROMA ETERNA, de Robert Silverberg, en donde el Imperio Romano nunca cayó, y subsiste hasta nuestros días.

SI LEER CIENCIA FICCIÓN QUIERES, ELEGIR A UN GRAN MAESTRO DEBES
Por último, considero que sería recomendable empezar leyendo obras de autores reconocidos del género. Particularmente les recomendaría a Isaac Asimov, Ray Bradbury, Arthur Clarke y Philip K. Dick. Si estos grandes maestros de la ciencia ficción no los enganchan, nadie lo hará. Así de simple.

Espero que les haya gustado el artículo y los motive aunque sea un poquito a empezar a leer ciencia ficción, es un género vibrante y del cual podemos aprender muchísimo puesto que varios de estos autores fueron divulgadores científicos y a través de sus relatos buscaron que conozcamos al menos una pequeña parte de lo que nos rodea. Estoy segura que no se van a arrepentir. Por si les dio curiosidad la novela que leí que era del género y yo no sabía, fue JURASSIC PARK, de Michael Crichton. 

¿Ya habían leído algún libro de ciencia ficción? ¿Cuál fue? ¿Me recomiendan alguno?

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