Reseña: Tengo un secreto

Tengo un secreto
Serie Los Incomprendidos [extra]
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Tras leer los tres libros que componen El club de los incomprendidos, he decido que Meri es mi personaje preferido, la más tímida de los Incomprendidos, la que tiene una mayor evolución a lo largo de la historia, y la que más secretos tiene que guardar. Cuando Blue Jeans anunció que saldría un extra contado exclusivamente desde su perspectiva tuve mis dudas. El final de ¿Puedo soñar contigo? no era tan abierto como para que mereciera continuación. Me parece que esa última escena, si bien un poco curiosa, era la ideal para cerrar la trilogía, para despedir a todos los personajes y quedarse con un buen sabor respecto a toda la historia. Porque aunque El diario de Meri ha sido cortito y entretenido, siento que le sobran páginas, que hay escenas que están de relleno y que le da más vueltas a una historia que ya estaba asentada. 

Nuevamente, no encontramos con el inconfundible estilo de Blue Jeans, fresco y desenfadado, directo y sin florituras, para contarnos algunos detalles que de alguna forma enriquecen la historia de los Incomprendidos. El libro intercala pasajes del diario de Meri con la historia que la misma protagonista nos va contando. Es su último año de instituto y a la proximidad de la separación se le añade las dudas que ella tiene en su relación con Paloma. Anteriormente, me gustó cómo Meri luchaba porque la aceptaran como era, con sus defectos y sus virtudes, logrando sentirse segura de su orientación sexual y consiguiendo a una compañera que la quería tanto como lo hace Paloma. Y aunque Paloma nunca me cayó muy bien que digamos, el hecho de que después de tanto luchar por esa relación, luego de tantas lágrimas y escenas dramáticas que se vivieron en el tercer libro, de pronto Meri se dé cuenta de que ya no siente nada por su novia... me pareció que todas esas páginas del libro fueron realmente en vano. Asimismo, la aparición de Laura es demasiada casualidad, demasiado poco creíble y hasta se siente forzado. ¿Cual es la probabilidad de encontrarse a una chica muy guapa, soltera, que sea lesbiana y que se sienta atraída hacia ti en el mismo compartimiento del mismo tren de vuelta a casa? Me parece que no tantas...

¿Para qué queremos tanto tiempo si lo vivimos sin lucir una sonrisa? ¿Por qué no somos capaces de avanzar sin necesitar ser necesarios? ¿Desde cuándo somos tan débiles para dar por bueno que el rumbo elegido no es el que nosotros escogemos?

Si en El diario de Meri hubieran incluido solo los pensamientos de la protagonista, el asunto habría quedado mejor. Eso, creo yo, es lo más destacable de la novela, no sólo porque tiene frases bonitas para guardarlas, sino porque Meri es una chica muy inteligente que sabe lo que quiere, pero que teme contarle al mundo su historia. Y todos esos pensamientos, esas reflexiones tan variadas las plasma de una manera que llevan a pensar en muchas cosas, en reflexionar un poquito sobre lo que nos rodea. Lástima que las escenas que parecen estar de relleno (el asunto de Valeria, el eterno tira-afloja de Bruno y Ester) merman un poquito las cosas buenas que he encontrado en la novela.

Por último, tengo que reconocer que leí esta historia por curiosidad, porque pese a todo, terminé con ganas de saber qué significaba realmente esa última escena del tercer libro de la serie. Les digo algo: descubrí el porqué - literalmente - en el último capítulo de El diario de Meri. Así que, si solo quieres comprender por qué el autor cerró ¿Puedo soñar contigo? de esa manera, ya sabes a dónde ir y qué buscar. Si quieres leer un poco más de los Incomprendidos, El diario de Meri no está mal. Como dije, entretiene y es corto, así que tampoco hay mucho que perder.