Reseña: Química Perfecta

Dicen que del amor al odio hay solo un paso. Si es así, la frase también puede funcionar en sentido contrario. Y para demostrarlo, tenemos aquí a nuestro dos protagonistas: Brittany Ellis y Alejandro Fuentes. Ella es rubia, de ojos azules y piel blanca; es capitana del equipo de animadoras y tiene una hermosa casa en la zona lujosa de Fairfield, Chicago. Él es moreno, chicano, tiene tatuajes, fuma y pertenece a los Latino Blood, una peligrosa pandilla de la zona sur de la ciudad. 

Dos personajes totalmente opuestos. Dos caracteres bastante disímiles. ¿Acaso los polos opuestos no se atraen?

Aunque todos crean que es así, Brittany no es tan perfecta como parece, tan solo ha creado una máscara tras la cual ocultarse, una imagen que esconde a la chica sencilla que es. Con una hermana minusválida a la que cuidar, una madre irascible e histérica con la que lidiar y un padre que nunca está en casa, la joven tiene suficientes problemas como para tener que soportar todos los líos que se le vendrán encima, empezando con el hecho de que Colin, su novio, ya quiere dar un paso más en su relación. Pero ella no está dispuesta a perder su virginidad, al menos, no con alguien que parece esconderle algo y cada vez le presta menos atención. Y mientras intenta arreglar su relación con el capitán de fútbol, su profesora de química está a punto de darle una sorpresa nada agradable: ha emparejado a todos los estudiantes de su clase según orden de apellido y a nuestra protagonista le ha tocado lo peor que le podía suceder: tendrá que trabajar, durante los próximos diez meses, única y exclusivamente con el gamberro Alex Fuentes.  Las cosas no serán fáciles y eso se pondrá en evidencia desde el primer día de clases.

  - Os presento a Alejandro Fuentes. Este verano, cuando no aguardaba en la esquina de la calle para acosar algún inocente, iba de excursión a los calabozos de los alrededores, ya sabéis a que me refiero. Y oculta un deseo que nadie sabría adivinar. (...) Su mayor deseo es ir a la universidad y llegar a ser profesor de química, como usted Sra. Peterson.
  - Os presento a Brittany Ellis -empiezo, sabiendo que todas las miradas recaen sobre mí-. Este verano se ha dedicado a ir al centro comercial para comprar ropa nueva para ampliar su vestuario, y se gastó el sueldo de papá en una operación de cirugía estética para realzar sus, ejem, cualidades. Su mayor deseo -añado, obteniendo la misma reacción que ha conseguido ella, durante la presentación que ha hecho sobre mi- es salir con un chicano antes de terminar el instituto.

Pese a que sus personalidades chocan muy a menudo, Brittany empieza a sentir algo por Alex, aunque no logra definir qué. Y él, por lo menos, parece no serle indiferente. Lo que la joven no sabe, es que el chico ha apostado a que se la llevará a la cama en menos de un mes. Si no lo logra, perderá uno de sus bienes más preciados: su moto. ¿Caerá la rubia en las redes del joven mexicano? Pero entre intentos fallidos y a medio logar, Alejandro empieza a darse cuenta de que necesita a Britany a su lado para sentirse completo, aun cuando todo el mundo parece intentar separarlos.

Química Perfecta tiene todos los ingredientes que necesita una novela juvenil para tener éxito: ambientada en una escuela; dosis de amor, de odio, de enfrentamientos; alguna pizca de eros y violencia, peligros y misterios en cantidades justas. Me encantó sobre todo el hecho de que los capítulos estén narrados de forma intercalada, desde el punto de vista de cada uno de los protagonistas.  

La narración es fresca y el ritmo ni muy apresurado ni muy lento. Al menos, no en el último capítulo. Si bien me gustan las historias con finales felices, en este me hubiera quedado contenta con un final no tan pasteloso. Me dio la impresión de que la autora tuvo que forzar un poco el epílogo, porque no sentí a Alex tan dentro de su personalidad en el último capítulo.

¿Mis personajes favoritos? Álex, Shelley e Isa. Con un poco de suerte, Paco también podría haber entrada a esta categoría, pero su actitud no me gustó mucho. Era un buen amigo, de eso no hay duda, por eso me dio bastante pena cuando pasó eso. Aborrecí con ganas a la mamá de Brittany, porque una madre de verdad no se comporta de esa manera. Y a Héctor, de cuya mano viene el secreto que Álex intenta descubrir.

En conclusión, la novela me gustó. Muchísimo, para ser sincera. Salvando uno que otros detallitos, bien podría merecerse un 5/5. Siempre le he tenido debilidad a las novelas amor-odio y al leer la sinopsis de esta, me dispuse a hincarle el diente sin pensármelo dos veces.

Química Perfecta

Simone Elkeles

Editorial Versátil

416 páginas

ISBN: 978-84-92929-00-9

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