Let's talk: ¿Hardcover o paperback?

Siempre que hay una Feria del libro se me presenta el mismo dilema: ante la posibilidad de comprar una edición en tapa dura (hardcover o cartoné) o tapa blanda (paperback o rústica) ¿cuál debo elegir? Cada uno tiene sus ventajas y desventajas, por lo que hay que considerar todas antes de llevarnos un libro a casa:

• EL PRECIO: El costo es lo primero en que suelo fijarme cuando decido comprar un libro. Si hablamos de títulos (juveniles o no) cuya publicación es más o menos reciente, una edición en tapa dura casi siempre va a tener un precio más elevado que el de tapa blanda, precisamente porque difiere en los materiales utilizados para su encuadernación. La diferencia de precio puede variar dependiendo de la editorial, el material, la calidad, etc. En mi país esa diferencia suele ser significativa (entre 30 y 60% más del costo de tapa blanda), además de que no se consiguen muchos títulos juveniles en hardcover. Pero si lo que buscas son clásicos o literatura contemporánea latinoamericana sí que hay varias opciones.

• EL PESO: Otra de las cosas importantes a considerar es el peso de la edición. Yo soy una persona que lee en cualquier lugar (particularmente en el bus pues hay que aprovechar esas horas de viaje) por lo que una edición en tapa blanda es mucho más fácil de transportar ya que tiene un menor peso y también es menos voluminoso. Si eres de los que cargan un montón de cosas en la cartera o pasa mucho tiempo fuera de casa, una edición en paperback es lo ideal para ti. Por otro lado, ¿quién no ha leído tumbado/a en la cama, el sillón u otro lugar similar? Un libro en cartoné suele ser más pesado y cansa más rápido los brazos ¡imagínate si se te cayera encima! 

• DURACIÓN: ¿sueles toquetear mucho a tus libros mientras lees? ¿no puedes salir de casa sin un libro y por eso te gusta llevarlo a todas partes? Es posible entonces que tus libros puedan sufrir algunos daños, especialmente en lo que a cubierta se refiere. Por mucho que trato de cuidarlos, mis ediciones en paperback muchas veces terminan con las esquinas (o las solapas, en caso de que los tengan) ligeramente dobladas. Del mismo modo, el lomo tiene una marca de doblez que se produce al mantener el libro abierto para leerlo. Y eso a mi no me gusta, por lo que cuando se puede trato de elegir títulos en pasta dura. 

• ESTÉTICA: un último punto puede ser lo bonito que se ven los libros en tapa dura apilados en la estantería. A eso hay que añadirle que muchas veces las ediciones en cartoné suelen estar mejor trabajadas, tienen más detalles tanto en las páginas como en las cubiertas y eso los convierte en pequeñas joyas. En lo personal, siempre he soñado con tener una biblioteca llena de libros (mejor aún si son en hardcover), pero lamentablemente mi bolsillo no me permite darme el lujo de una edición en cartoné cada poco tiempo.

En conclusión, si bien es cierto que yo prefiero más los libros en hardcover, a falta de dinero pero con muchas ganas de leer, las ediciones en paperback serán de momento mis elegidas (exceptuando uno que otro capricho xD). ¿Ustedes se decantan más por libros de tapa dura o prefieren la sencillez de los de tapa blanda? ¿Consideran otros ventajas/desventajas aparte de los que arriba he mencionado? ¡Espero leer sus comentarios!

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